-El significado de la Wiphala no se borra con una paradita de gallo viejo de nadie, enfatizó. Santa Cruz es de todos los bolivianos, explayó.

^{Marcelo Padilla}

Innovapress, 26 sep 20’21.- El presidente Luis Arce advirtió el domingo el retorno de algunos grupos racistas, exteriorizó su preocupación por el ultraje a la Wiphala que es un símbolo nacional y que se respeta además que -expresó- Santa Cruz no es la hacienda de nadie.

De esa manera hizo alusión a los hechos registrados recientemente durante los actos protocolares por los 211 años del aniversario del departamento de Santa Cruz, donde se presenció una evidente polarización entre facciones ciudadanas de oriente y occidente en plaza de armas de la capital oriental, donde también no se respetó la investidura del vicepresidente, David Choquehuanca.

“Hay preocupación con algunas personas en Santa Cruz que no han entendido y nunca van a entender, nosotros entendemos desde muchísimos años atrás, la Wiphala se respeta porque es el lenguaje, es la historia, es el resumen de toda la lucha de nuestros indígenas originarios y no se va a borrar por el capricho de un grupo de personas”, manifestó.

Dijo que “esa lucha de años, no se borra con una intensión, con una paradita de gallo viejo, no se borra con eso”, sentenció en un acto público en Achacachi, capital de la provincia Omasuyos de La Paz, en un encuentro con los Ponchos Rojos.

Hizo alusión al gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho -quien el pasado viernes- afirmó que “hará respetar la tierra cruceña” y no permitiría que “los masistas hagan política en el cumpleaños” de esa capital, por ello, -notó- el regreso de algunos grupos racistas.

“Nosotros estamos viendo con preocupación el regreso de algunos grupos racistas, de algunos sectores que nunca han entendido que Bolivia son los nueve departamentos, que no es una cuadra, que no son los amigos. El país son nueve departamentos que tienen su cultura, su historia y tienen que saberlo entender”, manifestó.

Recalcó que Santa Cruz no es propiedad de nadie, sino de todo el pueblo boliviano.

“Lástima que han pasado tantos años y no entienden, pero lo cierto es que Santa Cruz no es la hacienda de nadie, Santa Cruz es de todos los bolivianos y bolivianas y, por eso, el ejemplo de esa lucha son los Ponchos Rojos que vuelven a lanzar ese voto resolutivo para hacer respetar la Wiphala pidiendo justicia porque esto no puede volver a repetirse hacia adelante”, declaró.

Según Arce, es importante avanzar en la lógica racista, discriminadora que existió durante la colonia, en el pasado y no puede formar parte de la historia actual de la paz y hermandad que todos los bolivianos ansían.

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