-La mutación del virus en Inglaterra pone al mundo en estado de emergencia.
El Mundo
Innovapress, 20 dic 2020.- Lo que comenzó este sábado por la tarde como una prohibición del Gobierno británico para la movilidad de sus ciudadanos, ha terminado convirtiéndose en un “cerrojazo internacional” al Reino Unido.
La nueva cepa del coronavirus que ha aparecido en el sur de Inglaterra, Londres incluido, ha provocado que diversos países europeos, entre ellos Italia, Alemania, Países Bajos y Bélgica, decidan impedir el aterrizaje de cualquier vuelo que llegue desde las islas a excepción de la República de Irlanda.
Por su parte, España, por medio de su ministra de Exteriores, Arancha González Laya, ha pedido “una respuesta rápida y coordinada” de la Unión Europea como bloque.
La Presidencia alemana de la Unión Europea (UE) ha convocado este domingo una reunión urgente al más alto nivel para este lunes con el fin de coordinar una respuesta comunitaria a la nueva cepa. «La Presidencia ha invitado a los estados miembros de la UE a una reunión urgente del mecanismo de crisis de la IPCR (respuesta política integrada a la crisis, en sus siglas en inglés) mañana por la mañana a las 11.00 horas», tuiteó este domingo su portavoz, Sebastian Fischer.
Los acuerdos adoptados a través del citado mecanismo respaldan la toma de decisiones rápida y coordinada a nivel político de la UE para crisis importantes y complejas. La agenda de la reunión, precisó Fischer, será la «coordinación de la UE sobre la respuesta a la recién identificada variante Covid-19 en el Reino Unido».
Para preparar la cita del lunes, el gabinete del presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, convocó una videoconferencia a nivel de técnicos este domingo. En esa reunión, los representantes de «los estados miembros intercambiaron información sobre las medidas que pretenden aplicar en las próximas horas», como «prohibición de vuelos» y nuevas medidas sobre tests PCR.
Por el momento, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ya ha anunciado que está en contacto permanente con las autoridades británicas, que han intentado impedir que se desate el pánico doblemente dentro de sus fronteras.
Primero, porque las nuevas restricciones han provocado el mayor éxodo de Londres en tiempos de paz, con imágenes de estaciones de trenes y carreteras saturadas de ciudadanos intentando escapar antes de las Navidades.
Segundo, porque no quieren quedar marcados internacionalmente pues, según señalan sus asesores científicos, a pesar de que esta nueva cepa es hasta un 70% más contagioso que la original, no está demostrado que tenga una mayor mortalidad.
De hecho, recuerdan que el coronavirus ya ha mutado miles de veces desde que comenzó la pandemia.
IP/MP