-Bolivia seguirá insistiendo en que el incidente sea resuelto por la vía diplomática. Se busca una nueva audiencia para demostrar su inocencia.
Santa Cruz, Innovapress, 16 sep 2021.- El ministro de Defensa, Edmundo Novillo, afirmó este jueves que los tres efectivos militares con detención preventiva de tres meses en Alto Hospicio, región Norte de Chile, fueron detenidos cuando cumplían su labor encomendada por ley de lucha contra el contrabando, un delito trasnacional.
Señaló que el Gobierno contrató un equipo jurídico para que pueda llevar adelante todas las acciones necesarias en ese país que permitan la liberación de los tres militares y que se buscará una nueva audiencia para demostrar el trabajo que realizaban cuando fueron detenidos por Carabineros.
“Las actividades que realizaban los militares en la zona fronteriza por donde se internan de manera ilegal muchos vehículos fueron realizadas en la lucha contra el contrabando que es un delito transnacional, se ha judicializado el tema y en ese aspecto el Gobierno nacional también va a ayudar y apoyar”, declaró.
Para ello, afirmó que fue contratado un equipo jurídico de expertos y con ellos se tiene el objetivo, en el marco de la legalidad, de los procedimientos ante las autoridades judiciales de Chile de demostrar esos extremos, sin descuidar la vía diplomática.
“En ese sentido nuestros hermanos compatriotas que estaban cumpliendo su misión tienen todo el apoyo de sus autoridades del Gobierno nacional y particularmente del Ministerio de Defensa y el objetivo fundamental es establecer la verdad de los hechos y que se entienda que ellos, bajo bandera, estaban cumpliendo sus funciones constitucionales, de proteger la soberanía económica del país y se vieron involucrados en este ingrato impase”, añadió Novillo.
El 11 de septiembre, el Juzgado de Garantía de Pozo Almonte remitió con detención preventiva por 90 días al penal de Alto Hospicio a los tres efectivos militares del Centro Estratégico Operacional (CEO) detenidos por Carabineros en Colchane, acusados de robo de vehículos con intimidación y portación de armas de fuego.
Se trata de los militares bolivianos: teniente Jaime Herbas, subteniente Níger Ponce y sargento segundo José Bautista Carvajal.
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