-Quieren que ahora nazca de manera prematura cuando cumpla los siete meses y dar al bebé en adopción.
Santa Cruz, 1 nov 2021.- Néstor Higa, abogado de la madre de la menor de 11 años que se encuentra en embarazo resultado de una violación en Santa Cruz informó este lunes que la decisión adoptada de la progenitora de la niña es que se continúe con el estado de gestación y que su niña dé a luz.
“La decisión de la madre de la niña es proseguir con este embarazo, vamos a respetar la vida porque es algo extremadamente complejo porque se están tomando muchos elementos y valores de por medio los cuales pueden ser tomados de una u otra manera”, indicó.
Señaló que la niña tiene casi 24 meses de embarazo “por lo cual es inviable ya que se pueda interrumpir el embarazo ya que va a cumplir seis meses de gestación, por voluntad y por protección a la vida y de acuerdo a la explicación que se hizo en los hospitales, la menor decidió tener al bebé, pero no quiere criarlo”.
Y en este caso, según el jurista, la decisión debe ser asumida por la madre de la niña por lo que ya es una decisión que el embarazo no se interrumpa y continúe.
“La niña tiene dos opciones, una es que la madre lo pueda criar y tiene el derecho y no es dable que las instituciones están queriendo obligarla a que se interrumpa el embarazo lo que no corresponde por falta de legitimación activa”, explicó el abogado Higa.
El profesional añadió que en la declaración de la madre de la menor se establece que le impusieron un documento para que ella firmara, sin leerlo, pero también existe otra carta redactada por la propia progenitora de su puño y letra retractándose de su posición inicial de interrumpir la gestación.
En declaraciones a un medio televisivo, la madre de la niña exteriorizó que el bebé nazca. “Yo quiero que nazca, pero ya veré en el momento si lo criamos o lo damos en adopción”, afirmó, aunque remarcó que hay muchas familias que buscan un bebé para adoptar.
“Ella quiere que ese bebé nazca vivo, pero, así como dicen los análisis psicológicos, ella dice que no quiere criarlo”, acotó.
Sin embargo, reveló que desde que llevaron a la niña al centro de acogida dependiente de la Iglesia Católica no le permiten verla.
No le dijeron más, solo que le avisarán de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia. No participó en ninguna de las reuniones.
El caso de la niña víctima de Yapacaní ha reavivado en el país el debate sobre el aborto.
Según antecedentes, la niña y su familia decidieron inicialmente interrumpir el embarazo, como permite una sentencia constitucional 206/2014 en casos como este; sin embargo, tras la intervención de la Iglesia Católica se retractaron y ahora se inclinan por que la menor dé a luz.
Recientemente la Defensoría del Pueblo presentó una acción de libertad para interrumpir con el embarazo a lo que se sumaron otras instituciones preservando siempre la estabilidad integral, física, psíquica y emocional que está en ese dilema sobre la menor quien resultó embarazada a raíz de un abuso sexual.
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