Presidente Arce lanza las tareas de erradicación de coca en Chimoré con el reto de eliminar 10.000 hectáreas en 2022

-La incursión en las zonas excedentarias será de manera concertada con los productores cocaleros. Dijo que la coca es símbolo de la bolivianidad, resistencia, lucha -y sobre todo- dignidad.

El presidente Luis Arce durante el acto de inicio de operaciones de erradicación en Chimoré/ Fotos: Presidencia

Cochabamba, Innovapress, 10 mar 2022.- El presidente Luis Arce dio inicio este jueves a las tareas de erradicación concertada de la hoja de coca en el Trópico de Cochabamba con la meta de erradicar al menos 10.000 hectáreas de plantaciones excedentarias del arbusto.

“Este año plateamos la erradicación de 10.000 hectáreas y si seguimos con el ritmo actual, considero que podremos superar este objetivo y demostrar una vez más a la comunidad internacional lo exitoso de nuestro modelo de erradicación”, afirmó el mandatario en Chimoré.

Expresó que la hoja de coca es un símbolo de la bolivianidad, muestra de resistencia, lucha y, sobre todo, de dignidad.

Añadió que no es necesaria una “guerra internacional contra las drogas” para cumplir la meta de erradicación de forma concertada.

“No necesitamos de la guerra internacional contra las drogas, para que el movimiento campesino cocalero contribuya a la disminución de los volúmenes de producción de la hoja de coca”, dijo.

Arce informó que en 2021 se erradicaron 9.157 hectáreas, cantidad que superó en más de 400 hectáreas del objetivo planteado, hecho por el cual dijo que el país recibió felicitaciones de organismos internacionales tal el caso de la UNODC.

“El pasado año, se erradicó la suma de 9.157 hectáreas superando en más de 400 hectáreas el objetivo planteado y no solo eso, sino que también se recibieron felicitaciones internacionales por nuestro trabajo lo que demuestra que estamos en el camino correcto”, añadió.

Criticó que en el “neoliberalismo” se haya dado un modelo fallido de erradicación que priorizaba el uso de la violencia y la fuerza contra el pueblo cocalero y campesino lo que derivó en la muerte de productores cocaleros e incluso efectivos policiales y militares.

“Este modelo basado en la fracasada estrategia norteamericana de guerra internacional contra las drogas, era injerencista, represivo, atentatorio de la soberanía nacional y sobre todo violento”, refirió.

Recordó que, desde 1982 hasta el 2008, la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) destinó más de 300 millones de dólares para el modelo de “Coca 0”, que pretendía erradicar los cultivos de coca a cambio de proyectos alternativos no redituables y provocó crisis económicas en las localidades.

Por ello, indicó, durante la presidencia de Evo Morales, se introdujo el concepto de erradicación con base en la concertación y que este modelo se plasmó en la lucha contra el narcotráfico y la revalorización de la hoja de coca.

Lamentó que en la gestión 2020, en el régimen de Jeanine Áñez la lucha contra el narcotráfico y la erradicación de la hoja de coca excedentaria haya retrocedido paralizando la lucha por 178 días, por lo que solo se logró la erradicación de 1.770 hectáreas.

Sin embargo, tras la recuperación de la democracia se recuperó el modelo boliviano de erradicación de coca excedentaria de manera concertada y sin uso de la violencia, expresó.

IP/MP

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