-Develó que vivió una relación tormentosa con el empresario peruano Chirinos quien intentó matarla y la extorsionó.
Santa Cruz, Innovapress, 8 sep 2022.- La boliviana Consuelo Estrella Rivero Hoyos, acusada de estafa múltiple en el Perú negó haber defraudado en el vecino país y aseguró que fue víctima de una relación tormentosa con el empresario peruano, Julio Chirinos, quien la acusa.
«Tengo miedo que le pueda pasar algo a mi familia y si esto ocurre hago responsable a Julio Chirinos», expresó.
“Yo no lo estafé, he sido víctima de una relación tormentosa. Él (Chirinos) me secuestró por dos días, del 12 al 14 de agosto. Primero me quitó el celular, intentó asfixiarme y empezó a extorsionar a mis amistades y familiares con 50.000 dólares para que me deje en libertad. De esto se trata, de un despecho, yo no quería estar con él porque era violento”, reveló Rivero en Asuntos Centrales.
Chirinos es uno de los empresarios que acusa a Rivero de haberlo estafado 100.000 dólares para la compra de un lote en Santa Cruz. Ella negó la acusación e indicó que todo fue planeado por el peruano para desvirtuar las denuncias que interpuso en Perú.
«No fue voluntaria -agregó- ni esa declaración, ni el documento que me hace firmar aceptando un resarcimiento civil por 100 mil dólares».
La mujer presentó una denuncia por secuestro en contra de su expareja y asegura que durante esa noche que estuvo retenida él la intentó asfixiar y extorsionó a sus familiares y amigos.
La boliviana argumentó que llegó a Santa Cruz junto a sus dos hijas, porque teme por su vida ante las agresiones físicas y psicológicas que sufrió “constantemente” por parte del peruano Chirinos, con quien convivía en Lima.
«Nosotros ya tenemos una carpeta fiscal (en Perú), yo tengo que declarar el 15 de septiembre de forma virtual y él lo hará el 16 del mismo», dijo la mujer, luego de informar los delitos por los que denunció a Chirinos que son: secuestro, falsificación de documentos y violencia psicológica.
Recalcó que las denuncias de estafa que dio a conocer Julio Chirinos no tienen sustento y reveló que lo conoció por Facebook, luego de que este la invitara a unos cursos.
Preliminarmente se sabe que Rivero tiene al menos siete denuncias por estafa agravada entre 2011 y 2012 en Bolivia.
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