- Los probables autores, Antony Álvarez Calzadilla y Abigail Álvarez Murillo, están tras rejas, entre otros.
Santa Cruz, Innovapress, 21 jul 2024.- José Carlo Orellana Peralta, de 27 años, nunca imaginó que después de salir a trabajar iba a encontrar la muerte, su vida fue cegada por antisociales que pretendieron quitarle, preliminarmente se sabe, de su instrumento de trabajo, el Mitsubishi con el que se ganaba el sustento diario. Era chofer de Yango.
Orellana había sido reportado desaparecido el 13 de julio, días después fue hallado sin vida y semienterrado en el barrio El Trigal, Sur de Santa Cruz.
Dos personas involucradas en el asesinato del joven fueron detenidas en Oruro. Antony Álvarez Calzadilla y Abigail Álvarez Murillo, fueron aprehendidos en un bus en Caracollo mientras pretendían trasladarse a La Paz, para luego emprender hasta los Yungas, pero gracias a la intervención policial ambos fueron trasladados hasta Santa Cruz para sus cautelares.
Además de las dos capturas en Oruro, otras seis personas fueron detenidas en la capital oriental.
Entre las evidencias, la Policía halló palas y la fosa donde aparentemente se planeaba enterrar a la víctima. Los aprehendidos manifestaron que el móvil del crimen sería el robo del taxi; sin embargo, las autoridades continúan trabajando para establecer las verdaderas causas.
Cautelares
La Justicia ordenó este sábado la detención en Palmasola de varios implicados. Asimismo, dos adolescentes, uno de ellos el que disparó en la humanidad, Antony Álvarez y, la otra, Abigail Calzadilla fueron enviados a los centros de rehabilitación y de justicia juvenil Cenvicruz y Fortaleza.
La audiencia se desarrolló en medio de familiares que acudieron para expresar su repudio contra los detenidos.
Tras la llegada de los acusados, escoltados por la Policía al palacio de Justicia, la familia rompió en llanto ante la impotencia de haber perdido a su ser querido de la forma más violenta.
La hermana de José Carlo, llorando clamó justicia y pidió aplicar la pena máxima a los responsables. “Ellos están vivos, mi hermano muerto, lo mataron sin piedad”, exclamó.
Móviles del hecho
La fiscal, Rose María Barrientos, estableció que la madrugada del 14 de julio, Orellana recibió un llamado por celular de una mujer con la aplicación Yango para que se dirija a la zona de El Bajío entre el quinto anillo y avenida San Martín de Porres.
Allí subieron al vehículo dos adolescentes y pidieron que los traslade hasta el octavo anillo en el barrio Blooming.
Al llegar al lugar uno se sienta tras, se niegan a pagarle y hubo forcejeo. En ese instante el adolescente desde atrás le disparó, pero el taxista no muere por lo que lo golpean hasta liquidarlo.
Después trasladan al taxista al asiento del pasajero para tomar el volante y se van hasta inmediaciones de la Villa Olímpica del barrio El Trigal. Allí bajan al taxista y lo llevan a los matorrales abandonándolo.
La fiscal Barrientos señaló que las investigaciones continúan para determinar la participación de cada uno de los involucrados. Tras el crimen, el vehículo del taxista fue robado, pero luego fue hallado abandonado.
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