-El principal representante de este gremio hace un análisis de las medidas del Gobierno. Las consecuencias negativas de la pandemia son –hasta septiembre- de unos 600 millones de dólares y unas 460 empresas dejaron de operar.
Innovapress, 22 dic 2020.- Los empresarios industriales están muy preocupados por la situación actual de la economía. Tanto así que afirmaron con clara y total seguridad que “el país vive una profunda crisis económica”.
“El Gobierno ha mencionado que estamos atravesando una crisis muy profunda y coincidimos con esa apreciación”, afirmó el directivo de los privados industriales, Ibo Blazicevic.
En su análisis, el Producto Interno Bruto (PIB) terminó el 2019 con 2,2% y de allí a junio se tiene el último dato que se registra da cuanta de una caída de -11%. “Definitivamente estamos viviendo una crisis muy profunda”, dijo.
Analizó las medidas anunciadas por el Gobierno y manifestó que la reducción del Impuesto Al Valor Agregado (IVA) del 13% al 8% para compras con tarjeta constituye, para los industriales, una medida muy adecuada porque una determinación de esa naturaleza alentará primero, la bancarización cuyos niveles en Bolivia son muy bajos.
Añadió que ello impide –por ejemplo- el desarrollo del comercio en línea, es decir, que muchos bolivianos quieren realizar compras para actividades comerciales, pero no lo pueden hacer porque carecen de tarjeta.
A la par afirmó que el Impuesto a las Grandes Fortunas y su afectación –tal como lo dijo el Ministro de Economía- que afectará solo a 150 personas no es relevante en tanto y en cuanto no se graven al patrimonio de las empresas y se constituya, ese impuesto, en otra carga y grave a la ya elevada carga tributaria, por ende, ese impuesto no tendrá mayor impacto en la economía.
Declaró con relación a la reducción del IVA a las personas de bajos ingresos, que hay que esperar la norma para ver si primará el principio de universalidad.
Respecto al Bono Contra el Hambre de 1000 bolivianos que llega a más de 4,2 millones de personas, refleja una inyección “enorme de dinero a la economía boliviana porque estamos hablando de casi 600 millones de bolivianos que sin duda va a dinamizar la economía”.
“Nos hubiese gustado que aparte del Bono Contra el Hambre, una buena parte de ello, se pueda pagar con productos nacionales, se pudiese generar una especie de tarjeta con la cual se puedan comprar productos o servicios nacionales y eso ayudaría muchísimo más a dinamizar nuestra economía”, acotó.
Según Blazicevic, lo que los privados industriales temen es que en el actual estado de cosas ese bono acabe finalmente siendo gastado en productos importados o ilegales o de contrabando, actividad que está inundando Bolivia.
Efectos de la pandemia
Afirmó que para los privados nacionales, los efectos de la pandemia en los primeros seis meses tuvo una consecuencia de más de 600 millones de dólares de pérdidas que es un dato que corresponde exclusivamente al confinamiento.
Añadió que más de 460 empresas dejaron de operar al mes de septiembre y se tuvo un impacto directo en el empleo cuya tasa de desempleo pasó de un 4% a un 12%.
“Y estimamos que se han perdido más de 700 mil empleos. Los impactos son muchos, han caído las importaciones de bienes de capital, las exportaciones bolivianas de productos industriales en un 36%, por supuesto que estamos sufriendo severas consecuencias, por ello, es que necesitamos una urgente reactivación”, enfatizó.
IP/MP