- ‘Es golpe de Estado, está evidenciado. El que no ve eso está alineándose con la derecha, está alineándose con los intereses antinacionales que combatimos juntos’, expresó.
Potosí, Innovapress, 4 jul 2024.- El presidente de Bolivia, Luis Arce, afirmó este jueves que «quien niega el golpe se está alineando con la derecha», tras una semana del alzamiento militar en la sede del Ejecutivo de La Paz.
«Es golpe de Estado, está evidenciado. El que no ve eso está alineándose con la derecha, está alineándose con los intereses antinacionales que combatimos juntos», expresó el mandatario, durante el acto de aniversario de la Unión de Consejo para el Desarrollo de los Ayllus en Paz, en el departamento de Potosí.
El gobernante boliviano hizo esas declaraciones después de una semana de la toma militar al mando del destituido excomandante del Ejército Juan José Zuñiga que, por unas horas, puso en alerta al país. Arce agradeció al pueblo boliviano por haber «reaccionado bien» durante la irrupción militar y, por eso, confirmó una movilización de sectores sociales para el 12 de julio.
«(La convocatoria es) para demostrarle a esa derecha, a esos que comulgan con la derecha, a esos que están haciendo cálculos electorales y no están pensando en el pueblo boliviano, que el pueblo boliviano no va a permitir que se le arrebate nunca más la democracia de sus manos», aseguró.
Los sindicatos y sectores sociales afines al Gobierno de Arce anunciaron este jueves una movilización para la próxima semana en La Paz en «defensa de la democracia» y para expresar su respaldo al mandatario tras el alzamiento militar ocurrido el 26 de junio. La convocatoria a la movilización ‘En defensa de la democracia, la unidad y el futuro de Bolivia’ fue realizada por el llamado ‘Pacto de Unidad’ que conforman los sindicatos de campesinos, indígenas y obreros fieles al Gobierno. Los sectores prevén reunirse en El Alto, ciudad vecina de La Paz, y caminar desde allí hasta la plaza Murillo, la sede de los poderes Ejecutivo y Legislativo.
La semana pasada, militares al mando del destituido jefe militar Zuñiga tomaron la sede presidencial de La Paz por unas horas. Después de que Arce relevara al alto mando militar, el mismo día, Zuñiga y las tropas se replegaron, el excomandante fue detenido y ahora está preventivamente en una cárcel en el centro del país. Durante su aprehensión, Zuñiga acusó al presidente Arce de haber ordenado la acción militar para «levantar su popularidad».
En una entrevista con EFE, Arce aseguró que nunca tuvo una relación cercana con Zúñiga y que «alguien le habló al oído» al exjefe militar para hacerle creer que «podía ser presidente».
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