-Convoca a aprender de lo vivido y de las experiencias que deja la presencia del letal virus para que sirva en la reconstrucción de nuestro futuro ante la ausencia del Estado que no se manifestó en un gobierno de facto.

Innovapress, 24 dic 2020.- El presidente Luis Arce se dirigió a la población en un mensaje por la Noche Buena pidiendo a las familias bolivianas a no perder las esperanzas de mejores días y la reposición de las consecuencias del mortal virus que enlutó a muchos hogares.

El Jefe de Estado pidió que el 2020 debe servir para la reflexión de todos los bolivianos, caso contrario se convertiría en un periodo perdido y pidió a la población a no bajar la guardia.

“En estas fiestas promovamos la reconciliación y la paz, es momento de que los bolivianos nos hermanemos con la gran y diversa familia que somos. El dolor, el miedo y la impotencia que provocó la pandemia nos enseñaron que algo en todos nosotros tiene que cambiar, que hay algo que reflexionar, que no hay tiempo que perder en la reconstrucción de nuestro futuro”, manifestó.

Enfatizó que la población tiene que aprender a valorar la vida y consideró que los actos “deben estar impulsados por la búsqueda de justicia, no por el odio ni el rencor”.

“Juntos hemos luchado y hemos recuperado la democracia, hemos reconquistado nuestra capacidad de soñar con días mejores para nuestros hijos, hemos enfrentado a la enfermedad con creatividad, con esfuerzo sin recursos y sin Estado porque el gobierno de facto nos privó del derecho al trabajo, a la salud y de los derechos humanos”, reiteró.

Recordó y lamentó las muertes registradas en los últimos meses por la pandemia y demandó agradecer al personal médico que luchó en primera línea contra el Covid-19 salvando las vidas.

“En agradecimiento y homenaje (al personal de salubridad) comprometámonos a traducir el amor a nuestros seres queridos en protección de unos a otros, en precaución sobre nuestra salud y el respeto a las medidas de bioseguridad”, expresó.

“Los bolivianos saben superar las adversidades, tenemos una gran fortaleza de espíritu, en el abismo más profundo hemos sabido encontrar el camino, en momentos de convulsión y crisis hemos sabido encontrar la calma y decidir en circunstancias de miedo e impotencia, hemos sabido caminar combinando con sabiduría los protocolos médicos con nuestros conocimientos ancestrales”, afirmó.

“La unidad nos muestra que nuestra esencia boliviana es invencible, que podemos encontrarnos heridos, pero nuestra cabeza siempre estará erguida, que cuando actuamos unidos somos los dueños de nuestro destino”, señaló.

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