-Dijo que en el “gobierno de facto” de Áñez hubo acoso, agresiones, por lo que México recurrió al asilo, ofreció protección al expresidente Morales y posteriormente a Luis Arce. El Jefe de Estado boliviano exteriorizó su felicidad de estar en la tierra que lo acogió.

Innovapress, 24 mar 2021.- El presidente de México, Manuel López Obrador (AMLO), afirmó este miércoles que en Bolivia en 2019 hubo una “ruptura del orden constitucional” con la instalación del “gobierno de facto” de Jeanine Áñez. A la vez destacó el papel del pueblo boliviano, que protagonizó una “hazaña” para la recuperación de la democracia.

López Obrador y Arce Catacora encaran una agenda bilateral, que incluye reuniones para analizar, entre otros, el alivio de la deuda externa y el papel de la Organización de Estados Americanos (OEA), criticado por la postura de su secretario general Luis Almagro del fraude en los comicios de 2019 y el respaldo abierto a la administración de Jeanine Áñez.

“Amigo, compañero, hermano”, expresó AMLO —como se conoce al mandatario mexicano— a su homólogo boliviano Luis Arce. “Su gobierno es fruto de un movimiento indígena, popular, democrático que demostró una nueva manera de gobernar en favor del pueblo, en especial de los más pobres. Fue un gobierno surgido luego de dictaduras, de regímenes autoritarios, un gobierno que encabezó el presidente Evo Morales. Un gobierno exitoso, por más de una década Bolivia creció más que ningún otro en el continente americano”.

“Ese gobierno atravesó por una situación complicada, se ejecutó en Bolivia una ruptura al orden constitucional. Se obligó al presidente Evo a renunciar y se estableció un gobierno de facto. Hubo acoso, agresiones, nuestro país recurrió a su tradición de solidaridad y aplicación al derecho de asilo. Se ofreció esta protección al presidente Evo, a los principales dirigentes del movimiento democrático de Bolivia”, acotó.

Las relaciones bilaterales sufrieron una ruptura durante la administración de Áñez. Entre tanto, México defendió que hubo un “golpe de Estado” contra Morales, quien en noviembre de 2019 renunció a la Presidencia tras un informe de la Organización de Estados Americanos (OEA) que alimentó el discurso del fraude en los comicios que ganó Morales.

Dos días después, de la renuncia de Morales, rememoró AMLO, asumió Áñez, en una sesión sin quórum y tras proclamarse presidenta del Senado y luego presidenta de Bolivia.

AMLO y Arce restablecieron este miércoles las relaciones. “Se optó por resolver el problema, la crisis de Bolivia por la vía democrática; a pesar del acoso, de la polarización, el pueblo de Bolivia resolvió el conflicto de manera democrática, yo diría ejemplar, porque en muy poco tiempo se restableció la legalidad y la gente salió a votar y desde la primera vuelta ganó la Presidencia Luis Arce (con 55,10% de votación), presidente del Estado Plurinacional de Bolivia que nos acompaña”, enfatizó el presidente mexicano.

Insistió en que Bolivia “recuperó su democracia”, y “sin mucha violencia”. “Fue realmente una hazaña del pueblo de Bolivia. Ambos pueblos somos hermanos, pertenecemos a nuestra América y tenemos los mismos propósitos de justicia, de libertad, de desterrar el clasismo, el racismo, de hacer valer la igualdad y de reafirmar nuestra soberanía. Por esta razón celebramos la visita del presidente Arce”, anotó.

Destacó lo logrado en la larga gestión de Evo Morales, sobre todo en tres hechos fácticos:  un crecimiento económico ejemplar que tuvo un promedio anual de 4,8% y que incluso llegó a 6,8% en 2013. Segundo, la recuperación de los recursos naturales sin excluir la participación de empresas privadas nacionales y extranjeras, pero con mayores utilidades para el Estado. Tercero, “el más importante”, el bienestar del pueblo con una redistribución de la “riqueza acumulada”.

“Por eso fue muy importante el proceso antes del golpe de Estado, incluso eso fue lo que llevó a esa grave violación que significó que una minoría se impusiera por la fuerza. Recuerdo en esos días lo que pintaban en las casas de los dirigentes, de los servidores públicos… consignas racistas, una vergüenza. Pero todo eso fue como una mala noche, como una pesadilla, fue pasajera, y el pueblo de Bolivia lo resolvió por la vía democrática, y ahora a pesar del reto de la reconstrucción, con el apoyo de la gente estoy seguro que van a recuperar el camino del crecimiento, con justicia, con bienestar, porque el progreso sin justicia es retroceso”, remarcó AMLO.

“Fue realmente una hazaña del pueblo de Bolivia y es satisfactorio también el que nos encontremos de nuevo, porque el pueblo de Bolivia y el pueblo de México son pueblos hermanos, pertenecemos a nuestra América y tenemos los mismos propósitos de justicia de libertad de desterrar el clasismo, el racismo y hacer valer la igualdad y de reafirmar nuestra soberanía”, recalcó.

López Obrador resaltó que es muy especial la presencia de Arce en México. “Se puede decir religiosamente que fue un milagro, se puede decir en lenguaje laico que se trató de una hazaña del pueblo de Bolivia que estén ustedes aquí, presidente”, manifestó dirigiéndose a su homólogo boliviano.  

En 2019, el Gobierno de López Obrador brindó a Evo Morales el avión en que salió de Bolivia y luego le otorgó asilo político.

A su turno, el presidente Arce exteriorizó su felicidad de estar en México. Recordó que, en 2019, tras recibir un salvoconducto del Gobierno interino, fue a ese país como refugiado.  

“Es una felicidad venir a México esta vez ya no en calidad de refugiado y asilado, ante el golpe perpetrado en mi país en noviembre de 2019 estuvimos acá tratando de acondicionarnos a la nueva vida que nos esperaba, hasta que fuimos convocados por nuestras organizaciones sociales como candidato a la presidencia”, recordó.

Dijo que tendrá un “lugarcito especial” en su corazón para México, por su solidaridad con quienes sufrieron “persecución política”.

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