-Hubo una interrupción del orden constitucional, manifestó la Viceministra de Comunicación.

La Paz, Innovapress, 5 jul 2023.- El Ejecutivo, a través de la viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón, pidió este miércoles a los periodistas no perder el horizonte puesto que en 2019 lo que Bolivia vivió fue un golpe de Estado que desembocó -entre otros- en la pérdida de 36 vidas y la interrupción del orden constitucional democrático.

“Creo que no tenemos que perder el horizonte en lo que ocurrió en el país y lo que ocurrió fue un golpe de Estado porque ya se tenía, el 8 de noviembre, un motín que empezó en la UTOP en Cochabamba y desencadenó en una serie de sucesos, la renuncia del señor Kaliman (William)”, puntualizó.

“Lo que acá no se puede ocultar es que se tuvieron 36 muertes, no se ha respetado la sucesión constitucional, la normativa vigente a partir de esa autoproclamación (de Jeanine Áñez) porque no correspondía que vaya la bancada minoritaria en la Asamblea Legislativa, se han emitido normativas, decretos, el ‘decreto de la muerte’, tenemos 36 muertes, violaciones a los Derechos Humanos, tuvimos más de 1.000 detenidos, perseguidos”, añadió.

“Esta es una etapa que no podemos olvidarla porque ha ocurrido un golpe de Estado, acá lo que ha ocurrido fue que no se ha respetado la sucesión constitucional, ha existido una interrupción del orden constitucional, entonces eso es lo que se está investigando”, añadió la viceministra.

Recordó el arribo de expertos del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) que tuvo contacto con las familias afectadas.

“Acá lo que ha habido fue un golpe de Estado y eso no está en duda, acá no puede quedar en duda que hubo una interrupción al orden constitucional y a raíz de esas determinaciones hemos tenido un país con las tanquetas de las Fuerzas Armadas y el operativo determinado por el ‘decreto de la muerte’ para reprimir al pueblo boliviano, no había libertad de expresión lo que está pendiente en el país”, aseveró Alcón en un contacto en plaza Murillo.

Hizo esas declaraciones en torno a las posturas de los expresidentes Carlos Mesa y Jeanine Áñez quienes cuestionaron el registro de un golpe de Estado en 2019 luego que se develara que el expresidente Evo Morales exigiera a la Central Obrera Boliviana (COB) y al Pacto de Unidad de entonces que le pidieran su renuncia en medio de las tensiones y protestas sociales y políticas de aquel año.

IP/RDC