-En un partido agónico de arduo trámite para ambos planteles. Se fueron a los alargues y los brasileños supieron capitalizar en el duelo final. Abrió Cano, empató Advíncula y Kennedy sentenció.
Río de Janeiro, Innovapress, 4 nov 2023.- Al superar por 2-1 a Boca Juniors de la Argentina en los alargues, el Fluminense conquistó este sábado su primera Copa Libertadores, algo que se le había privado años atrás. Merecido campeón, pero no la tuvo fácil ante un cuadro argentino que fue amplio dominador en los minutos finales.
Fluminense ganó su primera Copa Libertadores, el torneo más importante de Sudamérica. Previo a este 2023, había accedido a la final en solo una oportunidad: fue en 2008, cuando cayó ante Liga de Quito cuando todavía había definición a dos partidos. Ahora, en este 2023, llegó por segunda vez y fue la vencida: le ganó a Boca en el Maracaná.
El Flu de Fernando Díniz se puso en ventaja a los 36 minutos gracias a una buena jugada colectiva por derecha de Samuel Xavier. El carrilero metió un buen centro que conectó Cano para poner el 1-0.
En la segunda etapa, el equipo comandado por Jorge Almirón llegó a la igualdad a los 72 minutos. El peruano, Advíncula, de otro planeta, se perfiló hacia su zurda y sacó un remate inatajable para el arquero rival.
Ya en el alargue, John Kennedy fue el héroe de la jornada. El atacante combinó con John Arias y sacó una potente volea que venció la resistencia de Chiquito Romero. Así, el Tricolor logró el primer título de su historia.
Durante el tiempo suplementario, todo Boca pidió penal tras una mano en el área de Fluminense, pero Roldán no sancionó.
Después de la insistencia con Frank Fabra por el carril izquierdo, el equipo de Jorge Almirón pisó el área rival y reclamó que la pelota rebotó en la mano de uno de los defensores de los dirigidos por Fernando Díniz.
Díniz optó por una alineación cautelosa, en la que Martinelli se desempeñó como compañero de ataque del argentino Germán Cano, delantero de 35 años, que se convertiría en uno de los anotadores de la final de la Copa Libertadores, en la que puede presumir que marcó 13 goles, uno de ellos para el campeonato, anotación que recordarán por muchos años los seguidores del equipo brasileño.
El Xeneize de Buenos Aires, Argentina, saltó a la cancha del Maracaná con un toque de nerviosismo en todas sus líneas, que no lo dejó tomar el control durante los primeros 45 minutos. Si bien Fluminense no generaba jugadas de gran peligro, sí logró tener mayor posesión de balón, repartido entre Ganso, Jhon Arias, Keno, Martinelli y Germán Cano.
En el primer cuarto de juego, las acciones se tornaron con mucho roce y faltas; generando un partido poco atractivo. Sin embargo, la afición de ambos equipos no dejó de alentar con sus característicos cánticos, sin dejar de brillar en varios momentos del encuentro.
El alargue definitivo
Fluminense arrancó el primer tiempo extra mostrando señales de que no quería definir su primer título por la vía de los penales y se adueñó del balón desde los primeros minutos, sin dejar jugar a un Boca, que se notaba cansado y sin la intención ofender la portería del equipo brasileño.
El Marcaná merecía poner punto final a esta edición de la Copa Libertadores con una gran jugada y un toque de drama. Al 99, Keno, de espalda a la portería de Chiquito Romero, acomodo el balón a Kennedy que metió un violento derechazo con dirección al palo izquierdo del arquero argentino, que nada pudo hacer para evitar el segundo y definitivo gol que le daría el campeonato a Fluminense. Después del gol, el autor de la anotación fue expulsado.
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