-Lo hace desde la clandestinidad. Para la Fiscalía, fue el nexo entre Luis Fernando Camacho y las Fuerzas Armadas.

La Paz, Innovapress, 24 oct 2023.- Luego de dejarla sola a Jeanine Áñez, quien lo puso en un alto nivel de confianza, desde la clandestinidad, el exministro de Defensa, Luis Fernando López Julio, apareció este martes en las redes sociales para afirmar que está dispuesto a volver a Bolivia y “poner el pecho”.

Hizo esas expresiones a través de la red social X después de que la Fiscalía lo acusara por el delito de genocidio por los hechos de Sacaba y Senkata en la crisis de 2019. Él y otros dignatarios de Estado, junto a la expresidenta transitoria, ahora recluida en Miraflores, ya conocen la imputación en su contra.

“¡Con la frente en alto, orgulloso de ser boliviano, patriota, padre de familia! Volvería a poner el pecho por mi país las veces que sea necesario. ¡Los tiempos de Dios son perfectos!”, posteó la exautoridad en X, siempre, desde la clandestinidad.

El lunes, el fiscal general del Estado, Juan Lanchipa, hizo conocer la acusación formal por el delito de genocidio por las muertes en Sacaba y Senkata, y anunció que se pedirá 30 años de cárcel para los procesados, entre los que se encuentra López Julio.

En la acusación, la Fiscalía establece que la exmandataria estuvo al mando de la “institucionalidad del Estado”, por lo que tenía el control de las fuerzas de seguridad del Estado y los operativos en Sacaba y en Senkata.

Además, recalcó que Áñez tiene principal responsabilidad en la emisión del Decreto Supremo 4078 conocido como el “decreto de la muerte” que libraba de culpa penal a los efectivos de las Fuerzas Armadas y la Policía que participaron en los operativos conjuntos para restablecer el orden.

Se desconoce el paradero de López Julio, pero se sospecha que está en Brasil. En septiembre de 2022, el Juzgado Décimo de Instrucción en lo Penal lo declaró en rebeldía.

Nexo

La Fiscalía sostiene que el exministro de Defensa, López Julio, fue el “nexo” entre el gobernador cruceño y exlíder cívico, Luis Fernando Camacho, y las Fuerzas Armadas (FFAA) para el supuesto golpe de noviembre de 2019. Por esa razón, esa instancia judicial determinó imputarlo por terrorismo dentro del caso Golpe I.

“Luis Fernando López Julio en conocimiento de todo lo planificado por Luis Fernando Camacho Vaca y otros, decidió formar parte de ese grupo de personas, con el compromiso de hacerse de una cartera de Estado, prestando una colaboración para el fin cometido, ya que, en su condición de exmiembro de las FFAA, fue el nexo entre Luis Fernando Camacho Vaca, José Luis Camacho Parada y otros, con miembros de las FFAA de ese entonces”, se lee en la imputación fiscal contra López.

Para el Ministerio Público, el accionar del exministro tuvo el objetivo de beneficiarse con una cartera de Estado. Acusó a López y los otros sindicados de generar caos y desorden en el país, con el fin de que renuncie Evo Morales a la Presidencia.

Entre los elementos colectados, la Fiscalía hace referencia a un video en el cual se escucha a Camacho decir: “Fue mi padre quien cerró con los militares para que no salgan, fue por esa razón que la persona que fue justamente a grabar con ellos y coordinar todo, fue Fernando López actual ministro de Defensa, fue por eso que él está de ministro de Defensa”. Ese detalle cursa en el informe técnico emitido por el sargento Adalid Romero.
IP/RDC