-Mandaban dinamitas en llantas en desuso hasta la integridad de los policías. Zozobra fue la que vivieron vecinos, comerciantes y ciudadanos de a pie en ese sector. Calles y avenidas de Villa Fátima convertidas en verdaderos campos de batalla. 12 policías heridos y más de una decena de cocaleros.

^{Marcelo Padilla}

La Paz, Innovapress, 4 oct 2021.- Una multitud de productores de coca confluyó este lunes al llamado del Comité de Autodefensa e irrumpió este lunes por diversos flancos hacia las instalaciones del mercado de la Asociación Departamental de Productores de Coca (Adepcoca) en la zona de Villa Fátima, en un enfrentamiento sostenido que luego se consumó con la toma física de esos predios.

En medio de detonaciones de dinamita, piedras, petardos, por un lado, y gases y balines, por el otro, convirtieron la zona de Villa Fátima en un verdadero campo de batalla. Los cocaleros con vítores de “¡los Yungas unidos, jamás serán vencidos!”, “los Yungas de pie, nunca de rodillas”, los cocaleros hicieron retroceder a los uniformados e ingresaron portando la bandera nacional hasta los predios de Adepcoca.

No quedó otra a la dirigencia oficialista que ponerse a buen recaudo, mientras los efectivos fueron retrocediendo y cediendo en el resguardo a esas dependencias.

El comandante departamental de la Policía, coronel Augusto Ruso, informó que fue tal la arremetida de los cocaleros que resultado de ello se tienen 12 efectivos con serias heridas por TEC (Traumatismo Encéfalo Craneal) y por explosión de dinamita.

“El desproporcionado uso de explosivos ha causado heridas en los policías, hay 12 efectivos con serios daños (…). Los cocaleros lanzaban las dinamitas en llantas de vehículos hasta la humanidad de los efectivos”, denunció la autoridad.

“Hoy es un día histórico para los Yungas, donde el socio productor de la hoja de coca ha recuperado su casa, que el gobierno nos ha querido quitar”, afirmó el dirigente cocalero del Comité de Autodefensa, Wilder Vargas, ya en las instalaciones de Adecoca.

“Desde aquí queremos decirle al gobierno que no se entrometa en una institución privada”, explayó.

Anticipó que a la brevedad se conformará una comisión electoral que organice elecciones para una nueva dirección de Adepcoca.

Entre tanto, el sector de Arnold Alanes hizo un pedido al Órgano Ejecutivo calificando la toma de los predios de Adepcoca como una acción “terrorista”.

“Exigimos al Ministerio de Gobierno que desbarate esta organización criminal terrorista, que ha venido a amedrantar con dinamitas a nuestra sociedad”, expresó Alanes al anunciar con seguir acciones legales para hacer prevalecer su legitimidad.

El conflicto cocalero tiene origen en la disputa por la dirección de la Adepoca entre tres sectores de cocaleros: Armin Lluta, opositor al gobierno; Fernando Calle y Arnold Alanes, estos dos últimos afines al oficialismo y el de Wilder Vargas que presidente el Comité de Autodefensa.

El mercado de Adepcoca es disputado porque en él, se comercializan a diario unos 48.000 kilos de coca, al amparo de una norma que permite su consumo con fines tradicionales, como infusión, mascado y rituales andinos.

Por ese edificio pasa el 90% del comercio legal de la hoja: 173 millones de dólares anuales, a diez dólares por kilo, el precio promedio de venta legal en 2020, según datos de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) difundido en agosto pasado y rescatadas por AFP.

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